Analfabetismo sanitario: ¿Cuáles son las causas?

El analfabetismo sanitario se ha convertido en un tema de preocupación en todo el mundo. Varias organizaciones de Estados Unidos, como el Instituto de Medicina, la Asociación Médica Americana, el Instituto Nacional de Salud y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), han promovido la alfabetización sanitaria como una prioridad de investigación.
Las personas con escasos conocimientos sanitarios pueden tener dificultades para entender las instrucciones o prescripciones de los frascos de medicamentos, los folletos de educación médica y para desenvolverse en los complejos sistemas sanitarios. Un estudio ha demostrado que las personas con escasos conocimientos sanitarios corren un mayor riesgo de acudir a urgencias, ser hospitalizadas y, en el peor de los casos, incluso morir.
Por otra parte, un estudio concluyó que es de esperar que los ancianos, las poblaciones minoritarias, los pacientes de bajo nivel socioeconómico y las personas con escasa atención médica tengan escasos conocimientos en materia de salud. Es importante tener en cuenta las causas de este problema para poder adaptar las acciones en consecuencia.

Uso de la jerga médica

El uso de la jerga médica o de terminologías médicas complicadas entre los médicos puede comprometer la comprensión del paciente. Esta situación es más evidente en pacientes con un dominio limitado del inglés.
El personal sanitario debe tener en cuenta que incluso un paciente nativo de habla inglesa también puede tener dificultades para entender la terminología médica. Los médicos deben explicar dicha terminología médica aunque se considere que el paciente tiene un nivel educativo superior.

Capacidades educativas bajas

Las personas con un nivel educativo bajo pueden tener conocimientos básicos inadecuados para entender las instrucciones médicas y navegar por los complejos sistemas sanitarios. Varios estudios han demostrado que existe una fuerte asociación entre un nivel educativo bajo y peores resultados sanitarios. Los investigadores han propuesto la alfabetización sanitaria como una posible vía para explicar esta fuerte relación.

Barreras culturales

La Comisión Conjunta, una organización independiente y sin ánimo de lucro con sede en EE.UU., ha reconocido que las barreras culturales son una de las tres amenazas para la comunicación médica eficaz. La cultura se refiere al conocimiento aprendido, compartido y transmitido de los valores, las creencias y las formas de vida de determinados grupos que se transmiten de forma intergeneracional y que influyen en los pensamientos, las decisiones y las acciones de forma pautada o determinada.
Las barreras culturales pueden variar según el país. Por ejemplo, en Malasia se cree que la insulina es una sustancia perjudicial. Un estudio realizado entre profesionales de la salud en Malasia incluso descubrió que hay pacientes diabéticos que creen que una terapia de insulina puede ser letal.

Dominio limitado del inglés

El inglés está considerado como el idioma universal de la medicina. De hecho, cualquier universidad que ofrezca un título de medicina incluirá el dominio del inglés como uno de los requisitos. Por ello, un paciente con un dominio limitado del inglés puede tener dificultades para percibir los conocimientos médicos.
Una encuesta ha demostrado que el 44% de los estadounidenses se encuentra en el nivel «intermedio» de conocimiento de la prosa. Es decir, pueden aplicar la información de un texto moderadamente denso y hacer inferencias sencillas. Esta cifra puede disminuir notablemente en el país de habla no inglesa.

Discapacidades diversas

Discapacidades como el declive cognitivo y las dificultades de aprendizaje pueden estar asociadas a una menor alfabetización sanitaria. En las personas mayores se puede encontrar un declive cognitivo que afecta a la capacidad de memorizar o recordar una prescripción, y sus razones para tomar decisiones sanitarias, que a su vez, afectan al rendimiento de la alfabetización sanitaria.
Esta relación puede observarse en un estudio realizado en América del Norte, en el que se constató que más de la mitad de los adultos mayores de 65 años tienen una baja alfabetización sanitaria. Ni que decir tiene que las personas mayores suelen tener más de una afección médica que puede exigirles además una mayor capacidad de alfabetización sanitaria. MIMS

Cómo mejorar el cumplimiento de la medicación por parte de los pacientes
La OMS lanza una iniciativa mundial para reducir a la mitad los errores de medicación para 2022
Los analgésicos sin receta médica se relacionan con un mayor riesgo de paro cardíaco
Fuentes:

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3814618/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *