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- Antes de un examen. Haz sencillos rollos de cuello y hombros justo en tu escritorio para aliviar los músculos tensos del cuello, los hombros y la espalda. Intente también apretar y relajar los dedos y las manos. Estos ejercicios pueden durar tan sólo 30 segundos y pueden repetirse tantas veces como sea necesario.
- Mientras estudias. Pruebe algunos movimientos sencillos de yoga para ayudar a relajar cualquier zona que pueda estar tensa mientras estudia. Los rollos de cuello y hombros pueden liberar la tensión en la espalda y los hombros. Los pliegues hacia delante y los giros aliviarán la tensión de la parte inferior de la espalda. Hazte un mini-masaje en la cara para ayudar a aflojar la mandíbula tensa. Las posturas de equilibrio, como la postura del árbol, pueden ayudar a concentrar tu energía para que puedas concentrarte en lo que tienes que hacer.
- Antes de dormir. Haz unos cuantos estiramientos de yoga antes de acostarte para ayudarte a relajarte, especialmente si tienes muchas cosas en la cabeza. Las posturas en las que te doblas hacia delante, como la postura del niño, tienden a ser calmantes. Te permiten desconectar del resto del mundo y sentirte tranquilo y en paz. Permanece en un pliegue hacia delante durante 3 o 4 respiraciones completas y lentas, y permite que tu cuerpo y tu mente se relajen.
¿Por qué el yoga para aliviar el estrés?
La vida puede ser estresante. Para empezar, está tu apretada agenda: levantarte súper temprano para ir a la escuela, estudiar hasta tarde en la noche para los exámenes, hacer malabares con la práctica de deportes, las tareas y las comidas. Los problemas cotidianos también pueden añadir estrés emocional: aconsejar a un amigo durante una ruptura, lamentar un desacuerdo con uno de los padres, sopesar una decisión importante o estresarse por saber si vas a entrar en el equipo universitario. Con muchas cosas en la cabeza, es fácil sentirse estresado.
Hay muchas maneras diferentes de hacer frente al estrés. Hablar con los amigos, hacer ejercicio y acudir a un consejero escolar son algunas de ellas. El yoga puede ayudar a reducir el estrés porque promueve la relajación, que es lo contrario natural del estrés. El yoga puede beneficiar tres aspectos de nosotros mismos que a menudo se ven afectados por el estrés: nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra respiración.
No tienes que esperar a sentirte estresado para hacer yoga, ¡y no deberías! Las personas que hacen un poco de yoga cada día a menudo encuentran que son más capaces de manejar las cosas cuando la vida se vuelve un poco loca. Practicar yoga aumenta tu capacidad de calmarte, concentrarte, equilibrarte y relajarte.
El yoga es más que estirar
Mucha gente piensa que el yoga es estirar o retorcer el cuerpo en varias formas de pretzel de aspecto imposible. Pero el yoga es más fácil de lo que parece. Hay posturas sencillas y complicadas, así que hay algo para cada habilidad. El yoga no requiere ningún equipo especial, por lo que se puede practicar prácticamente en cualquier lugar.
Las posturas de yoga son un buen ejercicio y pueden ayudar a aflojar los músculos tensos del cuerpo. Las zonas del cuerpo que tienden a soportar la mayor tensión son el cuello, los hombros y la espalda. Pero otras partes del cuerpo (como la cara, la mandíbula, los dedos o las muñecas) también pueden beneficiarse de sencillos estiramientos de yoga.
Sin embargo, el yoga es mucho más que un simple ejercicio físico. La clave para sacar lo mejor de cada postura es centrarse no sólo en el cuerpo, sino también en la mente y la respiración.
Cómo sacar el máximo partido al yoga
Cuando estés en una postura de yoga, piensa en cómo puedes unir tu cuerpo, tu mente y tu respiración. Incluso una postura sencilla como la de la montaña es un alivio del estrés cuando te concentras en mantener tu respiración lenta y uniforme, y te visualizas firme y estable como una montaña.
Mantente «en el momento». Cuando estamos estresados, solemos pensar en lo que tenemos que hacer en el futuro («Tengo que estudiar para ese examen») o en lo que podríamos haber hecho mejor en el pasado («¡Ojalá no hubiera dicho eso!»). En lugar de dejar que tus pensamientos vaguen mientras haces yoga, piensa en lo que tu cuerpo y tu respiración están haciendo en este momento. Observa cómo se siente un músculo o una zona del cuerpo en particular. Céntrate en inspirar lentamente mientras tu cuerpo se estira hacia arriba, y en espirar lentamente mientras te enroscas.
Estar en el momento de esta manera te ayuda a construir tu capacidad de enfoque y concentración, lo que ayuda en todos los aspectos de la vida.
Usa tu respiración cuando las cosas se ponen difíciles. Cuando una postura de yoga te resulte difícil, imagina que envías tu respiración a la zona de tu cuerpo que se siente rígida o tensa. ¿Te ayuda? También puedes utilizar esta habilidad en el resto de tu vida. Cada vez que algo te suponga un reto -un problema con los deberes, una discusión con tus padres- intenta concentrarte en tu respiración. Puede que te sorprenda lo bien que afrontas la situación.
Cuándo probar el yoga
Prueba a tomar una clase de yoga semanal o a utilizar un DVD de yoga para ayudarte a aprender algunas posturas de yoga. Hay clases así como DVD de yoga creados especialmente para adolescentes.
También puedes incorporar minipuntos de yoga en tu vida diaria para ayudarte a manejar los momentos de estrés. Aquí tienes algunas ideas:
El yoga y tú
La mejor parte del yoga es que te ayuda a descubrir más sobre tu mente, tu cuerpo y tus emociones. El yoga puede ayudarte a estar más equilibrado, tranquilo, centrado y relajado mientras atraviesas los habituales altibajos de la vida.
Por supuesto, no te sentirás instantáneamente más positivo, tranquilo o con más energía después de hacer unas cuantas posturas de yoga. Como con todas las cosas buenas, los efectos del yoga tienen que acumularse con el tiempo.
Pero si te das una media hora cada día para hacer unas cuantas posturas de yoga, después de un par de semanas deberías empezar a notar un cambio sutil. Sigue haciéndolo durante más tiempo y el yoga se convertirá en una parte natural de tu rutina diaria, lista para ayudarte a gestionar el estrés de la vida en el futuro.