La última semana de la Cuaresma se conoce como Semana Santa. Es cuando los cristianos recuerdan la última semana de la vida de Jesús y es el momento más importante del año cristiano. Hay muchos servicios religiosos y procesiones.
El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa. Recuerda a los cristianos el viaje que hizo Jesús a Jerusalén, montado en un burro, para celebrar la fiesta judía de la Pascua (Pésaj). Jesús eligió un burro para mostrar que había venido en paz. Mucha gente recibió a Jesús gritando, agitando palmas y arrojando ramas al paso del burro. Esperaban que Jesús fuera el Salvador que la Biblia había prometido.
El Domingo de Ramos es un día feliz y triste a la vez. Los cristianos están felices porque cantan alabanzas a Jesús pero también están tristes porque saben que Jesús murió menos de una semana después de su llegada a Jerusalén.
En las iglesias el Domingo de Ramos los cristianos reciben pequeñas cruces de palma hechas con hojas de palma. Las cruces de palma sobrantes se guardan para un servicio especial de la iglesia en el primer día de la Cuaresma, al año siguiente, cuando se queman (Miércoles de Ceniza). Esta ceniza se pone en la frente de la gente.
Cruces de palma hechas con hojas de palma
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