Paso 1 – Anestesia
Se administran medicamentos para su comodidad durante los procedimientos quirúrgicos. Las opciones incluyen anestesia local, sedación intravenosa y anestesia general. Su médico le recomendará la mejor opción para usted.
Paso 2 – El tratamiento
El grado de mejora que se puede conseguir con la revisión de cicatrices dependerá de la gravedad de sus cicatrices, y del tipo, tamaño y localización de las mismas. En algunos casos, una sola técnica puede proporcionar una mejora significativa. Sin embargo, su cirujano plástico puede recomendar una combinación de técnicas de revisión de cicatrices para conseguir los mejores resultados.
Los tratamientos tópicos, como los geles, las cintas o la compresión externa, pueden ayudar en el cierre y la cicatrización de las heridas, o a reducir la capacidad de la piel para producir pigmentos irregulares. Estos productos pueden utilizarse para tratar las cicatrices superficiales existentes y la decoloración, y para ayudar a la cicatrización de los procedimientos de revisión de cicatrices.
También pueden utilizarse tratamientos inyectables. El relleno dérmico puede utilizarse para rellenar cicatrices deprimidas o cóncavas. Dependiendo de la sustancia inyectable utilizada y de las condiciones particulares de su cicatriz, los resultados pueden durar de tres meses a varios años. La terapia debe repetirse para mantener los resultados. Otra forma de terapia inyectable utiliza compuestos a base de esteroides para reducir la formación de colágeno y puede alterar el aspecto, el tamaño y la textura del tejido cicatricial elevado.
Los tratamientos superficiales se utilizan con mayor frecuencia para la mejora estética de las cicatrices. Estos métodos pueden suavizar las irregularidades de la superficie y reducir la pigmentación desigual. Los tratamientos superficiales son un medio controlado para eliminar mecánicamente las capas superiores de la piel o cambiar la naturaleza del tejido. Estas opciones de tratamiento incluyen:
- La dermoabrasión es un pulido mecánico de la piel.
- La terapia con láser o luz provoca cambios en la superficie de la piel que permiten que se forme piel nueva y sana en el lugar de la cicatriz.
- Las soluciones de exfoliación química penetran en la superficie de la piel para suavizar las irregularidades de textura y color.
- Los agentes blanqueadores de la piel son medicamentos aplicados tópicamente para aclarar la piel.
Paso 3 – A veces, para las cicatrices más profundas se necesita una incisión para eliminar quirúrgicamente la antigua cicatriz
Paso 4 – Cierre de las incisiones
Algunas cicatrices requieren un cierre en capas. El cierre por capas se utiliza a menudo cuando la escisión se extiende al tejido por debajo de la superficie de la piel o en zonas con un alto grado de movimiento. El primer paso, o capa, requiere un cierre subdérmico (por debajo de la superficie de la piel) con suturas absorbibles o no extraíbles. Las capas de cierre continúan construyéndose, concluyendo con el cierre de la herida superficial restante.
Las técnicas avanzadas de revisión de cicatrices incluyen cierres de colgajos complejos y técnicas de plastia en W o en Z. Los cierres de colgajos pueden reposicionar una cicatriz para que sea menos visible o mejorar la flexibilidad cuando la contractura ha restringido la movilidad.
Se pueden utilizar sustitutos tisulares farmacéuticos si no hay suficiente tejido sano para el cierre de la escisión de una cicatriz. Esto es más probable con la revisión de cicatrices de quemaduras graves.
La expansión de tejido puede ser un sustituto de los injertos de piel. En este procedimiento, se coloca un globo inflable llamado expansor de tejido bajo la piel cerca del lugar de la cicatriz. Con el tiempo, el globo se llena lentamente de solución estéril para expandir la zona de piel sana. Una vez que la piel se ha estirado lo suficiente, se retira el expansor y la cicatriz, y la piel estirada se desplaza para sustituir el tejido de la cicatriz. Este proceso puede implicar múltiples etapas o procedimientos quirúrgicos para lograr los resultados finales.
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