Incorpora productos de coco. El coco es rico en fibra y compuestos antimicrobianos que ayudan a mantener a raya a los organismos patógenos. Además, los ácidos grasos que se encuentran en el coco proporcionan energía a las células que recubren el intestino delgado y ayudan a mantener una buena salud intestinal.
Toma caldo de huesos una vez a la semana como mínimo. El caldo de huesos contiene aminoácidos, minerales y factores de construcción de colágeno que su cuerpo puede utilizar para reparar el revestimiento del intestino delgado. Es uno de los mejores alimentos que puedes consumir para sanar tu intestino y mantenerlo sano a largo plazo.
Intervenciones en el estilo de vida
Dado que el tratamiento de la enfermedad celíaca se reduce a evitar el gluten durante el resto de tu vida, tendrás que hacer algunos ajustes significativos en tu estilo de vida; pero si eres celíaco, no hay razón para sentirte abrumado o solo. El apoyo a las personas con esta enfermedad está creciendo a pasos agigantados, y hay un montón de organizaciones que ofrecen ayuda sobre cómo abogar por ti mismo y difundir la conciencia.
Busca apoyo. La celiaquía es la enfermedad autoinmune más común en Estados Unidos, y existen múltiples grupos de apoyo en la mayoría de las regiones del país.
No sea tímido a la hora de abogar por sí mismo. Tanto si estás en una fiesta, como si sales a cenar a un restaurante o estás de viaje, debes asegurarte de que cualquier alimento que consumas no contenga gluten.
Lee las etiquetas de todo. Muchos productos que entran en contacto con tu piel, como el jabón, el champú, el acondicionador, la loción, el maquillaje y el jabón corporal, contienen gluten. Evítalos también.
Lee también las etiquetas de la comida de tu mascota. Respirar el polvo de las croquetas para mascotas que contienen gluten es una fuente de exposición al gluten. Por suerte, hay muchas opciones sin gluten y sin cereales disponibles para nuestros amigos peludos.
Suplementos y hierbas
Debido a que una de las principales consecuencias de la enfermedad celíaca es la mala absorción de nutrientes, tiene sentido reponer su cuerpo con vitaminas y minerales para compensar el déficit.
Suplementos multivitamínicos y multiminerales. Dado que la desnutrición es una característica de la enfermedad celíaca, tendrá que reponer sus reservas con multivitaminas y multiminerales no sintéticos, basados en alimentos, porque son más fáciles de absorber y tienden a ser más suaves para el sistema.
Curcumina. La curcumina, una poderosa hierba antiinflamatoria, es un conocido antioxidante que reduce la inflamación en todo el cuerpo y alivia el intestino. Tome 2 gramos, en forma de cápsula o polvo, dos veces al día.
Enzimas digestivas y probióticos. Considere la posibilidad de una suplementación a largo plazo con enzimas digestivas y probióticos para ayudar en los problemas de malabsorción, la baja producción de enzimas y ácidos y la falta de fuego digestivo.
Vitamina D. Las personas con enfermedad celíaca suelen tener niveles muy bajos de vitamina D. Tome al menos 1.000 UI de vitamina D3 al día (cápsulas, gotas o pastillas de gel).
Aceite de pescado. Tome de 3 a 4 gramos de aceite de pescado cada día para reducir la inflamación, mejorar la señalización y la conducción nerviosa y ayudar a curar el revestimiento del intestino delgado.
Pregunte a su médico
La celiaquía es una enfermedad hereditaria, lo que significa que sus padres son portadores de los genes y usted puede transmitírselos a sus hijos, así que haga que todos los miembros de su familia se sometan a una prueba de detección de la celiaquía.
Considere la posibilidad de realizar una gammagrafía ósea (DEXA). La osteoporosis es una de las principales consecuencias de la enfermedad celíaca, y una gammagrafía ósea le permitirá saber si es algo que tiene que abordar.
Haga que le revisen los niveles de vitamina D, vitamina B12 y folato. Si tiene la enfermedad celíaca, los niveles de estos nutrientes pueden ser bajos. Si su nivel de vitamina D es inferior a 50, tome un suplemento, aunque 50 esté en el rango «normal». Normal no equivale a óptimo. Los niveles óptimos están entre 50 y 90, y si no está en ese rango, puede tomar hasta 5.000 UI de vitamina D3 al día. Después de tres meses, vuelva a comprobar sus niveles para asegurarse de que están aumentando.