Se puede encontrar una gran variedad de aguas termales escondidas en varios rincones de este hermoso y diverso estado. Al crecer en Nueva Inglaterra no tenía ni idea de lo mucho que el suroeste de Estados Unidos tenía que ofrecer. Desde que experimenté por primera vez la magia del Parque Nacional de Zion, me propuse explorar toda la diversidad de paisajes del suroeste que pudiera en 2017. Una de estas misiones incluía un bucle a través de Utah, y visitar mi favorita personal de las muchas maravillas de la naturaleza, las aguas termales naturales.
Lo que es tan sorprendente de las aguas termales en Utah es su diversidad. Desde las bañeras situadas en la ladera de una colina de arcilla, pasando por las turquesas Meadow Hot Springs que discurren a 6 metros bajo tierra, hasta la serie de piscinas en cascada en el emplazamiento de una comuna hippie en Fifth Water; cada fuente termal ofrece una experiencia completamente única.
1. Mystic Hot Springs
Llegué a Mystic Hot Springs aproximadamente una hora antes del amanecer, conduciendo hacia el sur desde Salt Lake City. Cogiendo mi cámara y mi traje de baño, me dirigí a las bañeras humeantes para ver cómo la luz del sol tocaba la ladera de la montaña por primera vez ese día.
Mystic es lo más parecido a un spa natural que se puede encontrar. Con ocho bañeras y dos piscinas que funcionan a 98-110 grados Fahrenheit, es el lugar de relajación al aire libre por excelencia. Y si busca alojamiento, puede elegir entre camping, cabañas o antiguos autobuses escolares reconvertidos. Todos ellos reformados y mantenidos por el propietario del complejo.
2. Meadow Hot Springs
A sólo una hora de distancia, a través del Bosque Nacional de Fishlake, es donde se encuentran las Meadow Hot Springs. Hundidas en las praderas que dieron nombre al pequeño pueblo de Utah, esta serie de tres piscinas es particularmente única, con impresionantes aguas de color turquesa que alcanzan los 6 metros de profundidad. Los manantiales se encuentran en una propiedad privada, pero el propietario los mantiene abiertos al público.
Como siempre, es importante mantener el respeto (¡no dejar rastro!) por estas preciosas maravillas naturales para que puedan mantenerse abiertas y ser disfrutadas por todos. Tanto el lugar perfecto para un baño al amanecer, como para pasar el rato bajo las estrellas, te sugiero encarecidamente que te dirijas a Meadow!
3. El cráter Homestead
Situado a unos 50 minutos al sureste de Salt Lake está el cráter Homestead. Este manantial natural está gestionado por el Homestead Resort y sí que hay que pagar. Lo que hace que merezca la pena visitar el Homestead Crater es que ofrece la posibilidad de nadar, bucear y hacer submarinismo en la piscina geotérmica creada en el transcurso de 10.000 años. También ofrecen yoga con tablas de surf de remo. El agua es profunda, hasta donde alcanza la vista, y está a unos cómodos 90-96 grados.
4. Fifth Water Hot Springs
Un poco más al este está Fifth Water Hot Springs. A unos ocho kilómetros de ida y vuelta, las populares aguas termales cuentan con una serie de piscinas que caen en cascada por la ladera desde una cascada. Te aconsejo que hagas una excursión al amanecer, ya que las piscinas se llenan rápidamente de excursionistas, incluso entre semana.
La excursión en sí merece la pena, ya que discurre en su mayor parte a lo largo del río y ofrece lugares perfectos para acampar, relajarse y disfrutar del hermoso bosque que lo rodea.
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