Dependiendo de la causa de sus deposiciones lentas, sus tratamientos pueden variar. Aquí hay algunas soluciones que puede probar para fomentar movimientos intestinales más frecuentes y más fáciles de evacuar.
Cambios en la dieta
Los movimientos intestinales retrasados o más lentos pueden ser causados por una falta de fibra en su dieta. Una dieta que haga hincapié en las frutas y verduras naturales y no procesadas puede poner en marcha la digestión y ayudar a que sea más regular, a menos que tenga SII, gastroparesia u otra afección gastrointestinal crónica.
Las buenas fuentes de fibra incluyen:
- almendras y leche de almendras
- ciruelas pasas, higos, manzanas y plátanos
- vegetales crucíferos como el brócoli, la coliflor, las coles de Bruselas y el bok choy
- semillas de lino, semillas de girasol y semillas de calabaza
También considera añadir de dos a cuatro vasos de agua adicionales a tu rutina diaria.
Limitar los lácteos, que pueden ser difíciles de digerir, y eliminar los productos de panadería blanqueados, procesados y muy conservados también puede ayudar. Los helados, las patatas fritas y las comidas congeladas tienen poca o ninguna fibra y deben evitarse.
Reducir el café, que deshidrata el sistema digestivo, también podría ser una forma de equilibrar sus movimientos intestinales.
Además, añadir suplementos de fibra de venta libre que contengan psilio ha demostrado en estudios clínicos que hace que los movimientos intestinales sean más regulares.
Laxantes naturales
Los laxantes artificiales pueden empeorar los síntomas del intestino perezoso o incluso causar la condición. Pero hay laxantes naturales que puede probar para poner en marcha su digestión.
Añadir de 3 a 4 tazas de té verde a su rutina diaria puede actuar para mejorar su digestión.
Utilizar hojas de madera de agar como un laxante suave y natural es menos probable que cause el efecto secundario de algunos otros laxantes químicos, según un estudio en animales. Otros laxantes naturales son las semillas de chía, las verduras de hoja verde y el aceite de ricino. Sin embargo, todos los laxantes pueden llegar a entrenar a su intestino para que dependa de ellos para hacer que las cosas se muevan, así que cuando sea posible, incluso si son naturales, utilice los laxantes con poca frecuencia.
Probióticos
Se ha demostrado que tomar suplementos de probióticos mejora el tiempo de tránsito y la regularidad de los movimientos intestinales. Actualmente, todavía se necesita más investigación para determinar cuál es la mejor cepa de probióticos para el tratamiento del estreñimiento.
Comer alimentos probióticos, como el kimchi, el chucrut y el yogur, es otra forma de consumir cepas vivas de bacterias probióticas.
Ejercicio
El ejercicio ligero puede dirigir la sangre para que circule por el abdomen. Para algunas personas, esto pone en marcha el sistema. El ejercicio consistente puede impactar en sus síntomas de intestino perezoso al mantener su sistema digestivo encendido y comprometido. Algunas posturas de yoga pueden incluso ayudar a aliviar el estreñimiento.
Ajustar los comportamientos en el baño
Hay productos en el mercado que afirman que cambiar la postura durante la defecación puede mejorar la consistencia y la facilidad de usar el baño. Anecdóticamente, esto parece funcionar para algunas personas.
Si ha experimentado síntomas de intestino perezoso, podría valer la pena comprobar uno de estos productos, que cambian el ángulo de sus piernas a una posición más «en cuclillas» que sentada durante los viajes al baño. Aquí está nuestra opinión sobre si el Squatty Potty realmente funciona.