DISCUSIÓN

La hematohidrosis también conocida como hematidrosis, hemidrosis y hematidrosis, es una condición en la que los vasos sanguíneos capilares que alimentan las glándulas sudoríparas se rompen, haciendo que exuden sangre, y se produce en condiciones de estrés físico o emocional extremo. Un autor propuso el término «hematofoliculohidrosis» porque aparecía junto con un líquido similar al sudor y la sangre exudaba a través de los canales foliculares.

Se han sugerido diversos factores causales, como que sea un componente de una enfermedad sistémica, una menstruación vicaria, un esfuerzo excesivo, una púrpura psicógena y causas desconocidas. El miedo agudo y la contemplación mental intensa son las causas más frecuentes, como se informó en seis casos en hombres condenados a la ejecución, un caso ocurrido durante el Blitz de Londres, un caso de miedo a ser violado, un caso de miedo a una tormenta mientras se navega, etc. En otro informe de un caso indio, la causa probable de la hematohidrosis fue el estrés crónico, ya que las demás causas se descartaron mediante investigaciones detalladas. También se cree que los mecanismos histéricos y los trastornos psicosomáticos pueden inducir hemorragias. Se supone que la púrpura psicógena está causada por la hipersensibilidad a la propia sangre de los pacientes o la sensibilización autoeritrocitaria y se caracteriza por repetidos cultivos de equimosis, hemorragias gastrointestinales y hematuria.

Otro tipo de hemorragia a través de la piel son los estigmas psicógenos; un término que se utiliza para designar las zonas de cicatrices, heridas abiertas o hemorragias a través de la piel intacta. Los pacientes que pertenecen a este grupo suelen ser neuróticos. Los hallazgos clínicos de este tipo son una ligera elevación de la piel antes de una prolongada supuración de sangre, una decoloración azulada del tamaño de un guisante en la palma de la mano del paciente y lesiones similares a la erisipela. En otro estudio, una paciente desarrolló una hemorragia de sus antiguas cicatrices cada vez que tenía una ansiedad grave.

La sangre extravasada tiene componentes celulares idénticos a los de la sangre periférica. La ansiedad mental severa activa el sistema nervioso simpático para invocar la reacción de estrés-lucha o huida hasta tal punto que se produce una hemorragia de los vasos que irrigan las glándulas sudoríparas en los conductos de las mismas. El efecto en el cuerpo es la debilidad y la deshidratación de leve a moderada por la ansiedad severa y la pérdida tanto de sangre como de sudor.

Recientemente se ha propuesto que puede haber algunos defectos en la dermis que causen debilidad estromal. Estos defectos se comunicarán con los espacios vasculares de la dermis y acabarán dilatándose y agrandándose como espacios llenos de sangre cuando ésta entre. Después, exudarán la sangre hacia fuera, ya sea a través de los canales foliculares o directamente sobre la superficie de la piel, y esto ocurrirá siempre que la presión positiva en el interior sea suficiente. Posteriormente se colapsarán sin dejar cicatriz. Este fenómeno actúa como un globo, crece y decrece y explica así que estos episodios de sangrado sean a veces intermitentes y autolimitados. La biopsia inmediata es importante porque una biopsia realizada después del colapso de estos espacios no ayudará a identificarlos. Un estudio reveló algunas hemorragias intradérmicas y capilares enfrascados (obstruidos). No se encontró ninguna anomalía en las glándulas sudoríparas, los folículos pilosos y las glándulas sebáceas. Concluyeron que la base patológica de la hematohidrosis podría ser una vasculitis distintiva.

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