Un plan de cuidados de enfermería proporciona orientación sobre el tipo de cuidados de enfermería que puede necesitar el individuo/familia/comunidad. El objetivo principal de un plan de cuidados de enfermería es facilitar una atención estandarizada, basada en la evidencia y holística. Los planes de cuidados de enfermería se utilizan desde hace bastantes años para fines humanos y ahora también se están utilizando en la profesión veterinaria. Un plan de cuidados incluye los siguientes componentes: valoración, diagnóstico, resultados esperados, intervenciones, justificación y evaluación.
Según la enfermera británica Helen Ballantyne, los planes de cuidados son un aspecto crítico de la enfermería y están destinados a permitir unos cuidados holísticos estandarizados y basados en la evidencia. Es importante llamar la atención sobre la diferencia entre plan de cuidados y planificación de los mismos. La planificación de los cuidados tiene que ver con la identificación de los problemas y la búsqueda de soluciones para reducirlos o eliminarlos. El plan de cuidados es esencialmente la documentación de este proceso. Incluye en él un conjunto de acciones que la enfermera aplicará para resolver/apoyar los diagnósticos de enfermería identificados por la evaluación de enfermería. Los planes de cuidados permiten registrar las intervenciones y evaluar su eficacia. Los planes de cuidados de enfermería proporcionan la continuidad de los cuidados, la seguridad, la calidad de los mismos y su cumplimiento. Un plan de cuidados de enfermería favorece la documentación y se utiliza para fines de reembolso como Medicare y Medicaid.
El plan terapéutico de enfermería es una herramienta y un documento legal que contiene los problemas o necesidades prioritarias específicas del paciente y las directrices de enfermería vinculadas a los problemas. Muestra la evolución del perfil clínico de un paciente. El PNT es responsabilidad de la enfermera. Ella es la única que puede inscribir información y reevaluar el PNT durante el curso del tratamiento del paciente. Este documento lo utilizan las enfermeras, los auxiliares de enfermería y comunican las directrices a los asistentes del beneficiario. Los problemas o necesidades prioritarios suelen ser los diagnósticos del paciente y los problemas de enfermería, como las heridas, la deshidratación, el estado de conciencia alterado, el riesgo de complicación y mucho más. Estos diagnósticos giran en torno a problemas o necesidades que son detectados por las enfermeras y que necesitan intervenciones específicas y un seguimiento de la evaluación.Las directrices de enfermería pueden dirigirse a las enfermeras, a los auxiliares de enfermería o a los asistentes de los beneficiarios. Cada problema o necesidad prioritaria debe ir seguida de una directiva de enfermería o de una intervención. Las intervenciones deben ser específicas para el paciente. Por ejemplo, dos pacientes con el problema «cuidados no cooperativos» pueden necesitar directivas diferentes. Para un paciente la directiva podría ser: ‘educar sobre la patología y los efectos de los fármacos en la situación de salud’; para el otro, podría ser ‘utilizar un enfoque directivo’. Depende de la naturaleza del problema que debe ser evaluado por una enfermera.