En 1953, el profesor estadounidense Vernon K. Krieble desarrolló adhesivos anaeróbicos para el bloqueo de roscas en su laboratorio del sótano del Trinity College de Hartford, Connecticut. La empresa de Krieble, American Sealants, fundó la marca Loctite, que se promocionó como el inicio de una nueva era de fiabilidad mecánica al eliminar el aflojamiento por vibración de las fijaciones mecánicas, una causa frecuente de fallos en las máquinas. En 1956, el nombre Loctite fue elegido por la nuera de Krieble, Nancy Brayton Krieble. El sellador Loctite hizo su debut público oficial en una conferencia de prensa en el University Club de Nueva York el 26 de julio de ese año.
En 1963, American Sealants cambió su nombre por el de Loctite Corporation. Tras la muerte de Vernon Krieble en 1964, su hijo Robert H. Krieble, también químico, ocupó el cargo de director ejecutivo hasta 1985. En 1984 se creó la Fundación Vernon K. Krieble en honor al cofundador.
En 1964, Loctite introdujo los adhesivos de cianoacrilato (un producto de Eastman reempaquetado, desarrollado en Tennessee Eastman/Eastman Chemical en 1942, y comercializado originalmente como «Eastman 910»), más tarde conocido como «Super Glue». Fue el primero de muchos productos nuevos, como las siliconas, los epoxis, los acrílicos y el desarrollo de los nuevos anaeróbicos Loctite. La década de 1980 trajo consigo la incorporación de una línea de microadhesivos anaeróbicos.
En 1997, Loctite fue adquirida como marca insignia por Henkel, una empresa alemana de la lista Fortune 500. Desde entonces, Loctite ha seguido siendo una marca principal de Henkel y un proveedor de adhesivos para el hogar, epoxis, adhesivos en spray, adhesivos para la construcción y reparación del hogar, selladores y masillas. En los últimos años, la empresa se ha centrado más en las tecnologías ecológicas y sostenibles.