El deporte siempre es sinónimo de salud y bienestar, no obstante, a veces practicar determinadas actividades puede dar lugar a consecuencias negativas inesperadas. Es lo que refleja el «I Estudio sobre Salud Íntima de los Españoles” de Intimina, donde el 40% de las mujeres españolas desconoce que los deportes de alto impacto debilitan la musculatura pélvica.
Hablamos de deportes tan habituales como el running –tan al alza hoy en día–, aeróbic, tenis, atletismo, alto de trampolín y camas elásticas, pádel, equitación, baloncesto, esquí o halterofilia, pues provocan una presión en la zona perineal que podría derivar a largo plazo en pérdidas de orina o prolapsos.
El suelo pélvico se deteriora con la edad y con otros factores como la obesidad o la tos crónica, pero también con los deportes de alto impacto como los que hemos comentado. No obstante, si eres amante de cualquiera de estos, no temas porque hay una solución para que puedas seguir practicándolos sin problemas.
Mar García Valverde, fisioterapeuta y experta de suelo pélvico para Intimina y directora de la Clinica Fisiofit, explica que el suelo pélvico es un conjunto de músculos que cierra la parte inferior del abdomen, formando una especie de ‘hamaca’ que da sostén a la vejiga, vagina, y el recto. Mantener esta musculatura fuerte nos ayudará a tener una buena continencia uretral y anorrectal, soportar el peso extra del bebé durante el embarazo, mejorar las sensaciones en las relaciones sexuales y, en definitiva, minimizar las consecuencias sobre el tono muscular de la zona que se producen por los cambios hormonales de la menopausia.
Según datos del Observatorio Nacional de la Incontinencia, en España una de cada cuatro mujeres sufre incontinencia urinaria. Pero no solo es un problema de las mujeres con la menopausia o las que acaban de dar a luz: «Aunque el ejercicio físico es beneficioso para la salud, los saltos en la ejecución de algunos deportes, así como las cargas repetitivas y el aumento de la presión intraabdominal pueden provocar incontinencia de esfuerzo, algo bastante común entre las mujeres deportistas”, sentencia García Valverde.
El 40% de las mujeres españolas desconoce que los deportes de alto impacto debilitan la musculatura pélvica”
Entonces, ¿qué puedes hacer? En primer lugar, si practicas estos deportes y empiezas a notar ciertos síntomas de incontinencia, la fisioterapeuta recomienda reducir la frecuencia de su práctica y alternarlos con los ejercicios de Kegel. Lo ideal sería que todas las mujeres los practicasen a priori para evitar futuros problemas.
García Valverde asegura que muchas dejan de practicarlos porque no ven los resultados a corto plazo porque no saben ejecutarlos con la técnica adecuada. Por este motivo asegura que es muy importante el asesoramiento de un especialista en la reeducación del suelo pélvico a la hora de pautar qué tipo de ejercicios y con qué frecuencia se deben realizar.
Además de seguir una rutina de ejercicios, también existen ejercitadores que pueden ayudarnos a obtener mayores beneficios. En el caso de Intimina, ofrecen tres esferas de distintos pesos (28 gr, 38gr y 48gr) que proporcionan la cantidad justa de resistencia para mejorar la fuerza del suelo y aseguran que se está realizando la técnica correcta de levantar hacia arriba– que pueden ayudarnos a obtener mayores beneficios.
También cuentan con un dispositivo innovador e inteligente, KegelSmart, que reconoce la fuerza de la musculatura a través de 5 niveles, desde el más débil hasta el más fuerte, cada uno con una rutina de ejercicio con el ritmo y la duración adecuados para ese nivel.
Existen alternativas también como la enna Pelvic Ball, una esfera vaginal ovalada que contiene una bola de acero inoxidable en su interior que vibra intensamente al chocar con las pareces de la esfera. Gracias a esta vibración, provoca la contracción de los músculos pélvicos, mejorando la tonificación y la circulación de la zona.
Muchas mujeres dejan de practicar los ejercicios de Kegel porque no ven los resultados a corto plazo, ya que no saben ejecutarlos con la técnica adecuada”
Mar García ValverdeFisioterapeuta y experta de suelo pélvico para Intimina y directora de la Clinica Fisiofit
Otra alternativa es practicar gimnasia abdominal hipopresiva: «Es una técnica en la que se utiliza el control de la respiración y el diafragma, para disminuir la presión intraabdominal, a la vez que se activa la contracción de la musculatura profunda del abdomen y el suelo pélvico. Todo ello en posiciones que incluyan una corrección postural adecuada, tanto en ejercicios estáticos como dinámicos”, concluye la experta.