El glaucoma es un término general que abarca un grupo de enfermedades con un patrón característico de daño al nervio óptico. El nervio óptico es el haz de fibras nerviosas situado en la parte posterior del ojo que lleva los mensajes visuales desde la retina hasta el cerebro. Hay muchos tipos de glaucoma clasificados por exámenes clínicos. El más común es el glaucoma primario de ángulo abierto (GPAA). Lo más habitual es que los pacientes con GPAA no experimenten ningún síntoma hasta que la enfermedad progresa a una fase avanzada. Los síntomas más comunes de la enfermedad avanzada son la pérdida de visión lateral y la disminución de la calidad de la visión, que pueden dificultar considerablemente las actividades cotidianas, incluida la conducción. Los tratamientos actuales disponibles han demostrado ser eficaces para ralentizar la enfermedad, pero no para revertir el daño del nervio óptico.
Para evitar este debilitamiento visual irreversible, es importante que un oftalmólogo examine sus ojos para detectar el glaucoma, especialmente si es portador de algunos de los factores de riesgo conocidos, como los antecedentes familiares de la enfermedad. Es fundamental tener unos conocimientos básicos sobre las pruebas del glaucoma para poder tomar una decisión informada sobre sus opciones de tratamiento bajo la dirección de su médico. Algunas de las pruebas se describen a continuación.
Comprobación de la presión ocular
El aumento de la presión ocular es el factor de riesgo más importante del glaucoma. Se considera como uno de los «signos vitales» cuando se visita al oftalmólogo. Puede pensar en la presión ocular alta como un factor de riesgo de glaucoma, al igual que la presión arterial alta es un factor de riesgo de accidente cerebrovascular. La prueba de la presión ocular se denomina tonometría, y el método más común se conoce como «aplanación», en el que un diminuto instrumento entra en contacto con la superficie del ojo después de adormecerlo con un colirio. Es indoloro y rápido, pero requiere su colaboración. Saber esto es útil porque si no está totalmente relajado en el momento de la medición, la lectura puede ser engañosa. También es importante seguir respirando durante la medición.
Prueba del campo visual
La prueba del campo visual se considera una prueba funcional, y permite a su médico decirle si ha perdido algún campo de visión por el glaucoma, cuánto ha perdido, y puede ayudar a determinar el ritmo de progresión de la enfermedad, lo que a su vez ayudará a adaptar el tratamiento. Su médico podrá indicarle la gravedad de su enfermedad basándose en esta prueba.
Aunque la prueba no es dolorosa, y sólo se tarda unos minutos en cada ojo, si está demasiado ansioso o cansado, es posible que no pueda realizar la prueba de forma fiable. Además, la prueba puede requerir cierta experiencia de aprendizaje, por lo que puede ser necesario repetirla. No hay ninguna preparación especial para la prueba, ni es necesario quitarse las lentes de contacto. La prueba de campo visual debe repetirse periódicamente, aunque la frecuencia puede variar significativamente dependiendo de su situación específica.
Pruebas de imagen del glaucoma
Las pruebas de imagen del glaucoma son una forma fiable de que su médico controle la progresión del glaucoma. Las pruebas no son invasivas y no implican radiación. Sus pupilas se dilatarán con gotas para los ojos y, a continuación, el médico fotografiará su nervio óptico con una cámara digital o utilizará otras tecnologías (OCT) para trazar un mapa de su nervio óptico. Independientemente de la modalidad que elija su médico, los resultados están disponibles de inmediato, y se pueden proyectar en una pantalla de ordenador para su discusión.
El examen ocular con dilatación
Una evaluación completa también incluirá un examen ocular con dilatación. Al evaluar su glaucoma, el oftalmólogo dilatará sus ojos para poder obtener una vista ampliada y en 3D de su nervio óptico. Esto ayuda a determinar el estado de sus nervios ópticos y del glaucoma. Evaluará la forma, el color, la profundidad, el tamaño y los vasos del nervio óptico. Además, se realizará un examen de la retina central y periférica.
Pruebas de espesor corneal y de «ángulo»
Algunas otras pruebas de contacto incluyen una prueba de espesor corneal (paquimetría) y una prueba de «ángulo» (gonioscopia). Son absolutamente necesarias y se incluyen en las «constantes vitales» del examen ocular.
Prueba del grosor de la córnea (paquimetría)
La paquimetría mide sin dolor el grosor de la córnea con una pequeña sonda después de adormecer el ojo con un colirio. Una córnea fina puede contribuir a que las lecturas de la presión ocular sean artificialmente bajas, y una córnea gruesa puede contribuir a que las lecturas de la presión sean más altas de lo que realmente son. También se sabe que las córneas delgadas son un factor de riesgo para el glaucoma. La medición del grosor de la córnea proporciona información crucial para que su médico pueda adaptar su tratamiento.
Prueba de ángulo (gonioscopia)
La gonioscopia es otra prueba realizada por su médico con un goniolente de mano. Algunos médicos se refieren a la lente como una «lente de contacto de examen». El médico apenas tocará la lente de gonioscopia en la córnea adormecida. El procedimiento es sencillo, rápido y no duele. Es similar al uso de espejos en un periscopio para ver zonas que no son visibles a simple vista. Una vez que la lente de gonioscopia está en contacto con la córnea, permitirá al oftalmólogo ver el «ángulo». El «ángulo» es la zona en la que la córnea (la parte clara de la parte delantera del ojo) se une al iris (la parte coloreada del ojo). El «ángulo» es también el lugar donde se encuentra la malla trabecular. En circunstancias normales, la mayor parte del líquido que se crea en el interior del ojo debe salir del mismo pasando por la malla trabecular. Si la malla trabecular es visible en el examen gonioscópico, los médicos lo denominan ángulo «abierto». Si la malla trabecular está bloqueada por el tejido cicatricial o el iris, se denomina ángulo «cerrado».
Resumen
Hemos hablado de algunos de los componentes importantes de su examen ocular para detectar el glaucoma. Hay algunas pruebas especiales que son únicas para el diagnóstico del glaucoma y el seguimiento de la enfermedad. Si tiene alguna duda sobre las pruebas o los resultados, pida a su oftalmólogo que hable de estos temas con usted.