Cómo debatir
¿Qué es debatir?
Un debate es una discusión estructurada. Dos bandos hablan alternativamente a favor y en contra de una determinadacontención generalmente basada en un tema de actualidad. Sin embargo, a diferencia de las discusiones que puedes tener con tu familia o amigos, a cada persona se le asigna un tiempo para hablar y las interjecciones se controlan cuidadosamente. El tema de la disputa suele estar preestablecido, por lo que es posible que tenga que apoyar opiniones con las que normalmente no está de acuerdo. También hay que argumentar como parte de un equipo, teniendo cuidado de no contradecir lo que han dicho los demás.
¿Por qué debatir?
Es una forma excelente de mejorar las habilidades orales y es particularmente útil para proporcionar experiencia en el desarrollo de un argumento convincente. Los que se ven obligados a argumentar en contra de su punto de vista natural se dan cuenta de que los argumentos, como las monedas, siempre tienen al menos dos caras.
Las habilidades básicas para debatir
El estilo
Es la manera en que comunicas tus argumentos. Es la parte más básica del debate que hay que dominar. El contenido y la estrategia valen poco a menos que transmitas tu material de forma segura y persuasiva.
Velocidad
Es vital hablar a un ritmo lo suficientemente rápido como para sonar inteligente y que te dé tiempo a decir lo que quieres, pero lo suficientemente lento como para que se te entienda fácilmente.
Tono
Variar el tono es lo que hace que suene interesante. Escuchar un solo tono durante toda una presentación es aburrido.
Volumen
Hablar bastante alto es a veces una necesidad, pero no es en absoluto necesario gritar durante todo el debate independientemente del contexto. No hay ninguna necesidad de hablar más alto que el volumen al que todos los presentes pueden oírte cómodamente. Gritando no se ganan los debates. Hablar en voz demasiado baja es claramente desastroso, ya que nadie podrá oírte.
Claridad
La capacidad de expresar de forma concisa y clara cuestiones complejas es la esencia del debate. La principal razón por la que la gente empieza a parecer poco clara suele ser porque pierde la «corriente de pensamiento» que la mantiene en marcha. También es importante mantener la sencillez. Si bien las palabras largas pueden hacerte parecer inteligente, también pueden hacerte incomprensible.
El uso de notas y el contacto visual
Las notas son esenciales, pero deben ser breves y estar bien organizadas para ser eficaces. No tiene absolutamente ningún sentido intentar hablar sin notas. Por supuesto, las notas nunca deben ser molestas y perjudicar el contacto con el público, ni deben leerse al pie de la letra. La mayoría de la gente hace un esbozo de los principales epígrafes de su discurso, con breves notas debajo de cada uno.
Cuando se escriben notas para la refutación durante el debate, suele ser mejor utilizar una hoja de papel separada para poder anotar los detalles de lo que han dicho los otros oradores y luego transferir un esbozo a las notas que realmente se van a utilizar.
El contacto visual con el público es muy importante, pero no deje de cambiar la mirada. A nadie le gusta que le miren mejor.
Contenido
El contenido es lo que realmente dices en el debate. Los argumentos utilizados para desarrollar el caso de tu lado y refutar el del lado opuesto. La información sobre el contenido que se ofrece a continuación es una visión general de lo que se espera de ti en el debate. La logística final de cuánto tiempo debatiréis, cuántas personas habrá en vuestro grupo y cómo se desarrollará el debate (es decir, qué equipo hablará primero, etc.), será decidida por vuestro líder de tutoría.
Caso (argumento) – el conjunto
Introducción – El caso que vuestro grupo está presentando debe ser esbozado en la introducción. Se trata de exponer los principales argumentos y explicar la orientación general del caso. Esto debe hacerse brevemente, ya que lo más importante es pasar a argumentar. También es una buena idea indicar los aspectos del tema que va a discutir cada uno de los miembros del equipo.
Conclusión – Al final, una vez que todo el mundo ha hablado, es útil resumir brevemente lo que su grupo ha dicho y por qué.
Caso (argumento)- las partes
Habiendo esbozado el conjunto de su argumento, debe empezar a construir un caso (las partes). La mejor manera de hacerlo es dividir su caso en entre dos y cuatro argumentos (o dividir su caso en función del número de personas de su grupo). Debes justificar tus argumentos con lógica básica, ejemplos trabajados, estadísticas y citas. El debate se basa en la estrategia de la «prueba». La prueba, o la evidencia, que respalda tu afirmación es lo que la convierte en un argumento. Hay varias formas de dividir los casos en grupos de argumentos (por ejemplo, político/económico/social o moral/práctico o internacional/regional, etc.) o simplemente en función de los argumentos individuales si no puedes agrupar ninguno. En cada uno de estos epígrafes básicos, deberá explicar los motivos que subyacen al argumento y justificarlo utilizando los métodos indicados anteriormente. Suele ser mejor poner los argumentos más importantes en primer lugar. Este es un ejemplo de esquema de un caso:
«Los medios de comunicación ejercen más influencia sobre lo que piensa la gente que el gobierno. Esto es cierto por tres razones. En primer lugar, la mayoría de la gente basa sus votos en lo que ve y oye en los medios de comunicación. En segundo lugar, los medios de comunicación pueden establecer la agenda política entre las elecciones decidiendo qué temas informar y con qué detalle. En tercer lugar, los medios de comunicación han conseguido demonizar a los políticos durante los últimos diez años, de modo que ahora la gente es más propensa a creer a los periodistas que a los políticos.»
Todos los argumentos de este esbozo de caso son discutibles (casi de inmediato se pueden ver los contraargumentos), pero le dan al caso una amplia gama que cubre todo tipo de temas. El truco no es presentar un caso hermético, sino uno bien argumentado. Piensa: «¿Puedo argumentar eso?».
Rebate – las partes
Los argumentos pueden ser realistas, morales o lógicos. Pueden ser interpretaciones erróneas o también pueden ser intrascendentes o irrelevantes. Un equipo también puede contradecirse entre sí o no completar las tareas que se proponen. Estos son los fundamentos de la refutación y casi todos los argumentos pueden resultar deficientes en al menos uno de estos aspectos. He aquí algunos ejemplos:
1. «La eutanasia obligatoria a los 70 años ahorraría dinero al país en pensiones y asistencia sanitaria». Esto es cierto, pero es moralmente defectuoso.
2. «Prohibir la colocación de productos de cigarrillos en las películas hará que más jóvenes fumenporque hará que fumar sea más misterioso y tabú». Esto es lógicamente defectuoso, la prohibición sería más probable para detener el flujo constante de imágenes que hace que fumar parezca atractivo y glamuroso y en realidad reducir el número de jóvenes que fuman.
3. «Mi socio entonces mirará las cuestiones económicas…» «Blah..blah..blah…(5minutos después y todavía no se mencionan las cuestiones económicas)» Esto es un claro fallo en la explicación de una parte importante del caso y se debería llamar la atención sobre ello. Aún mejor es cuando un orador comienza con «para ganar este debate hay tres cosas que debo hacer…». Si el orador no hace ninguna de esas cosas, se le puede colgar de la soga repitiendo las palabras exactas – por su propia admisión no puede haber ganado el debate.
Rebate – el conjunto:
Es muy importante tener una buena perspectiva del debate e identificar cuáles son los argumentos clave. No basta con rebatir algunos argumentos al azar aquí y allá. Por supuesto, las técnicas utilizadas anteriormente tienen un valor incalculable, pero deben utilizarse de forma adecuada. Hay una serie de cosas que debe hacer para desmontar sistemáticamente el caso de ateam:
1. Pregúntese cómo ha enfocado el caso la otra parte. ¿Su metodología es defectuosa?
2. Considere qué tareas se ha fijado la otra parte (si es que hay alguna) y si de hecho las ha abordado.
3. Considere cuál es el énfasis general del caso y qué suposiciones hace. Intente refutarlas.
4. Tome los argumentos principales y haga lo mismo. No vale la pena repetir un punto de refutación que ya ha sido utilizado por otra persona, pero puede referirse a él para demostrar que el argumento no se ha mantenido. No es necesario corregir cada ejemplo utilizado. No tendrás tiempo y tu objetivo es mostrar que el argumento del otro lado es defectuoso en las áreas clave.