La temperatura ambiente más segura para tu bebé está entre los 16°C y los 20°C.
Cuando los bebés se calientan demasiado aumentan las posibilidades de sufrir el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), por lo que The Lullaby Trust recomienda que las habitaciones donde duerme tu bebé se mantengan a una temperatura de entre 16°C y 20°C.
Esto puede parecer frío para los adultos, por lo que es mejor medir la temperatura utilizando un termómetro como el Tommee Tippee Room and Bath Thermometer o un Groegg en las habitaciones donde duerme tu bebé.
Los estudios también han demostrado que compartir la habitación, pero no la cama, con tu bebé durante los primeros seis meses puede reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).
Para ayudar a mantener a tu bebé a una temperatura segura y confortable cuando duerme, solo debes utilizar ropa de cama como un saco de dormir para bebés, no sábanas sueltas ni mantas en su cuna. Hasta los 12 meses, debes evitar el uso de ropa de cama blanda y voluminosa, como edredones, colchas o mantas, ya que pueden provocar sobrecalentamiento y aumentar el riesgo de SMSL.
Cómo comprobar si tu bebé tiene demasiado calor o demasiado frío
Toca la barriga o la nuca de tu bebé. Si su piel está caliente o sudorosa, quita una o más capas de su ropa de cama. Las manos y los pies de tu bebé suelen estar más frescos. Esto es normal.
¿Qué pasa si mi bebé no se encuentra bien?
Si tu bebé no se encuentra bien, no tengas la tentación de abrigarlo más. Los bebés que no se encuentran bien necesitan menos ropa de cama, no más.