Nacido como Andrés Arturo García-Menéndez el 12 de abril de 1956, el actor Andy García tenía cinco años cuando huyó con su familia de su Cuba natal a Miami, donde el padre de García, antiguo abogado, estableció un exitoso negocio de cosméticos al hacerse ciudadano estadounidense. Tras graduarse en la Universidad Internacional de Florida, García se trasladó a Los Ángeles y actuó brevemente como cómico, trabajando como expedidor de muebles y camarero cuando los empleos escaseaban. Aunque su debut en la televisión fue un pequeño papel en el piloto de 1981 de Hill Street Blues, García no tuvo que viajar lejos de su ciudad natal de adopción para su arco cinematográfico, Blue Skies Again (1983), que se rodó en Florida. (También hizo su primera aparición en la pantalla en esta olvidable comedia de béisbol la actriz Mimi Rogers).
No fue hasta que le dieron el papel de un capo de la droga en 8 millones de maneras de morir (1985), de Hal Ashby, cuando la carrera de García despegó realmente. Después de interpretar papeles importantes en Los intocables (1987) y Stand and Deliver (1988), alcanzó un grado adicional de estrellato cuando fue elegido para interpretar al sobrino de Michael Corleone en El Padrino Parte III (1990), un papel por el que obtuvo nominaciones al Oscar y al Globo de Oro como mejor actor de reparto. El talento de García era lo suficientemente impresionante como para que el guionista Henry Bean escribiera el guión del drama de corrupción policial Asuntos Internos (1990) pensando específicamente en el actor. Pero después de varios años de personajes al límite, García suavizó su imagen en la pantalla como el marido demasiado bueno para ser verdad de una alcohólica (Meg Ryan) en Cuando un hombre ama a una mujer (1994).
La carrera de García decayó un poco durante la segunda mitad de los años 90, y el actor concentró parte de sus energías en protagonizar varias películas hechas para la televisión y otras de factura española como Muerte en Granada (1997). Aunque García encontró su lugar en el cine estadounidense -de hecho, fue una de las pocas estrellas latinas que logró pasar al cine de Hollywood-, su profunda conexión y lealtad a su herencia cubana quedó ilustrada por su participación en proyectos que reflejan ese sentimiento. Ha producido y dirigido un homenaje al mambo cubano Cachoao titulado Cachoao: Como su ritmo no hay otro, y, en un momento dado, planeó dirigir y protagonizar una adaptación cinematográfica de La ciudad perdida, una novela épica sobre la revolución y el exilio del escritor cubano Guillermo Cabrera Infante.
García trabajó junto a George Clooney y Brad Pitt en la película de 2001 Ocean’s 11, en la que interpretó al propietario sin escrúpulos de un casino, y apareció en las secuelas de la película Ocean’s 12 (2004) y Ocean’s 13 (2007). Se unió al reparto de La pantera rosa 2 en 2009, y asumió un papel principal en el drama histórico Mayor gloria (2012), que sigue a un grupo de patriotas mexicanos dedicados a defender a las generaciones futuras de la tiranía.
Un devoto hombre de familia, García vive fuera de los focos con su esposa María Victoria (también inmigrante cubana) y sus tres hijas.
– Hal Erickson, Rovi